martes, 21 de febrero de 2012

Para salvar el idioma

La diversidad lingüística está estrechamente relacionada con la biodiversidad del planeta. En estos tiempos cuando la humanidad está llamada a preservar las especies del reino vegetal o animal en peligro de extinción, también el idioma debe defenderse porque corre los mismos riesgos de desaparecer.
Datos alarmantes revelan que desde que el ser humano empezó a hablar unas 30.000 lenguas se han perdido y todos los años, al menos diez idiomas se extinguen. De esa manera, poco a poco, la multiplicidad cultural se va empobreciendo.
Para crear mayor conciencia sobre las tradiciones lingüísticas del mundo, cada 21 de febrero, se celebra el Día Internacional de la Lengua Materna, proclamado por la UNESCO con el objetivo de preservar las lenguas como patrimonio de la humanidad.
En Cuba es loable el interés del gobierno por promover medidas encaminadas al cuidado y preservación del idioma mediante proyectos educacionales y culturales. En tal sentido se busca una coherencia con las disposiciones que dicta periódicamente la Real Academia Española de la Lengua y en todas las provincias, teniendo en cuenta sus peculiaridades, se ponen en práctica iniciativas para favorecer estos propósitos.
En Las Tunas, por ejemplo, hace ya 18 años surgió ABC, un programa que se trasmite de lunes a viernes por las ondas de la Emisora Provincial Radio Victoria, el cual se define como fiel defensor del idioma que compartimos.
Ana Ibis González Fonseca, su actual guionista y conductora, en declaraciones para Tiempo21 enfatizó que “el propósito es mejorar el léxico de quienes lo escuchan porque a través de las frecuencias radiales se llega por igual al niño, al joven, al anciano, al profesional y a la ama de casa”.
“En cada emisión, apuntó, nos detenemos en la ortografía de las palabras y en sus orígenes, casi siempre acometiendo una labor de corrección. Es así como el equipo de realización se siente a gusto destacando que las palabras han de ser brillantes como el oro, ligeras como alas y sólidas como el mármol”.
La lengua materna se considera la base de la identidad, la comunicación y la integración social de las personas; sin embargo, un vocabulario pobre dificulta todos estos procesos y es la causa de conflictos personales y sociales.
Al respecto la también fundadora de ABC agregó que “nuestro deber como usuarios es respetar la lengua materna, hablar y escribir correctamente, con plena conciencia de que el habla en Cuba incluye elementos generales del español que hablan y escriben los chilenos, los peruanos, los españoles… pero contiene además vocablos típicos del cubano, o sea, nuestra lengua es expresión de identidad cultural e histórica”.
“El lenguaje importa cualquiera que sea el nivel cultural. Según como lo usemos se cerrarán o abrirán puertas. Ya sabemos que un examen, un empleo o un ascenso pueden perderse por errores de este tipo. En tanto, es preocupante la pobreza léxica que se observa en muchos jóvenes y adultos, es decir, la escasez de vocabulario, la reiteración de las mismas palabras y la mala dicción.
De ahí que resulte acertadísima la decisión del sistema educacional cubano de poner énfasis en la enseñanza de la ortografía y mayor rigor en la redacción”.Para promover la difusión de las lenguas maternas e inspirar a la solidaridad basada en el entendimiento, la tolerancia y el diálogo cabe reflexionar entonces en qué y cuánto estamos haciendo por nuestro idioma en el actuar cotidiano. ¿Será suficiente?

No hay comentarios:

Publicar un comentario