Caminar para enseñar historia

La invitación siempre me parece interesante; pero a la vez muy osada. Caminar para enseñar historia, esa es la idea que impulsa a un nutrido grupo de jóvenes de las provincias de Las Tunas y de Camagüey, cuyo interés común se funde en la pasión que sienten por la naturaleza, la cultura y las tradiciones de lucha cubanas.

Así lo comentó a Tiempo21 Yanier Cruz Góngora, quien forma parte de este proyecto histórico, cultural y ambiental que tiene el objetivo de vincular la labor educativa con la conservación del entorno, mediante la visita a lugares donde ocurrieron importantes sucesos de nuestras gestas independentistas.Cuenta este entusiasta muchacho, actualmente guía de instalaciones en el Jardín Botánico de esta ciudad, a unos 690 kilómetros al este de La Habana, que la iniciativa surgió hace 23 años, en el Instituto Preuniversitario en el Campo (IPUEC) Manuel de Quesada, en San Miguel de Guáimaro.“Los fines de semana en la escuela hacíamos trabajos voluntarios en las áreas de frutales, nos reuníamos con los profesores y planificábamos excursiones a distintas zonas de la localidad, hasta que un día de octubre de 1989 decidimos hacer algo más significativo en ocasión de conmemorarse un aniversario del Desembarco del yate Granma. Recuerdo que por las carencias del transporte -dice Yanier- por poco no vamos, entonces nació la propuesta de ir a pie.”“Bajo la guía del profesor Esmel Arias, fundador, presidente y activo participante del proyecto a pesar de sus 75 años, se ha continuado la experiencia de recorrer largas distancias hasta diferentes sitios históricos para incentivar los conocimientos de la obra martiana, el estudio de la historia local y la protección de especies de la flora en peligro de extinción con el propósito de enriquecer las colecciones existentes.”

A ello se suma además el trabajo de educación ambiental a través de varios círculos de interés; así como de sociedades científicas, lo cual deviene instrumento enriquecedor que facilita a la vez la recreación, el sano e instructivo esparcimiento.

Varios ascensos al Pico Real del Turquino, la mayor elevación de Cuba; recorridos por Dos Ríos, donde cayó en combate nuestro Héroe Nacional José Martí; entre otras, figuran como sus más atrevidas acciones.

En este 2012, próximos a la efeméride del 2 de diciembre, ya estas intrépidas personas se encuentran en camino hacia la playa Las Coloradas, para allí rememorar importantes sucesos y, al mismo tiempo, seguir haciendo historia.

Por los niños y sus derechos

La noticia pasó ante mis ojos como leída entre líneas. Algo dentro de mí se resistía al detalle; pero pudo más el interés por conocer que el sentimiento de dolor que me provocó de primera instancia.

Por ser de esos temas impactantes y estremecedores tuve que dejar a un lado la nota de prensa y luego de un rato retomar la lectura que tenía como protagonistas a niños fantasmas. Sí, menores de edad que deambulan por las calles de Londres a la vista de todos y a pesar de eso no existen a efectos legales, pues nunca se han registrado oficialmente.

La investigación de una cadena británica se refería a centenares de historias de menores sin nacionalidad alguna. De ahí que un grupo importante de ellos se ha visto obligado a prostituirse para comer y muchos, cuya existencia no consta en ningún lado, no pueden tener acceso a la educación ni pueden recibir ayuda del estado.

Pensé entonces en lo difícil que les resultaría la vida a esos y otros tantos pequeños en el mundo; me preocupó su futuro y por varias horas me siguió dando vueltas en la mente esa imagen que graficaba la información, donde aparecía un niño durmiendo en plena acera, desapercibido ante los transeúntes.

Este lunes se inicia la Jornada provincial de tránsito, en la cual están inmersos los miembros de la Organización de Pioneros José Martí de la provincia de Las Tunas, a unos 690 kilómetros al este de La Habana, quienes desarrollarán variadas acciones con el objetivo de elevar su cultura vial.
Porque en Cuba no hay nada más importante que un niño, se trata de prepararlos desde edades tempranas en los conocimientos de las leyes del tránsito y evitar así la ocurrencia de accidentes.
Entre las instructivas propuestas durante esta semana figuran charlas, conferencias, ejercicios prácticos en la vía con los estudiantes y la premiación de concursos de dibujo infantil sobre esta temática.
Los pioneros se adentrarán en el aprendizaje de las regulaciones viales, en las labores preventivas y en la promoción de las leyes, interés esencial que estimula la cortesía entre choferes y peatones.

Tradición que recuerda a los difuntos

Las tradiciones tienen muchos encantos y curiosidades. Son, en definitiva, costumbres que se transmiten de generación en generación y adquieren un fuerte arraigo popular.

Aunque no es una práctica muy difundida, en Cuba, se celebra cada 2 de noviembre el Día de los Fieles Difuntos, cuyo objetivo es recordar a quienes desaparecieron físicamente.

Fue en el año 998 cuando, en el sur de Francia, un monje benedictino  instauró la oración por los difuntos en los monasterios. De allí se extendió a otras congregaciones hasta ser aceptado este día para la conmemoración en varias regiones del planeta.

La costumbre de asistir al cementerio a rezar encierra un profundo sentimiento de religiosidad. Es así como en diversos países se decoran los sepulcros, se  conforman altares con flores y se prepara la comida favorita del fallecido; además de exhibir fotografías y otras pertenencias.

Ciertas creencias suponen que en la noche los muertos regresan a sus casas y comparten los alimentos con los vivientes, una manera diferente de asumir los matices de un suceso cultural que deviene homenaje.