jueves, 23 de diciembre de 2010

Adiós al 2010.

Un nuevo año toca las puertas de nuestras vidas para impulsar sueños y esperanzas, deseos de paz, prosperidad y de felicidad.
Llega el 2011, un calendario en el cual, sin dudas, enfrentaremos distintos retos en el plano personal, familiar y laboral. Mis mayores deseos son que sepamos hacer frente a esos desafíos con optimismo y alegría.
De sabios será dejar atrás rencores, malos entendidos y disgustos. Pensemos mejor en las nuevas amistades que hicimos, tratemos de conservar los viejos amigos que nunca serán amigos viejos, estrechemos aún más las relaciones afectivas con cada uno de nuestros seres queridos. Justo es agradecer, primero por el don de la vida, y luego por cada una de las experiencias que nos ofrece. Lo importante es vivir, aprendiendo a valorar ese gran regalo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario